Hoy miércoles 12 de junio de
2013, tuve la oportunidad de implementar un juego con los niños que están a mí
cargo, tercer grado.
El arca de Noe; consistió en
formar parejas y cada una de ellas
eligió ser un animal. Uno de los miembros de la pareja se vendó los ojos, el
otro debía imitar el animal que había elegido (tanto en sonido como en postura y movimiento). Su compañero
debía encontrarlo por el sonido.
Cada vez que se encontraban
con otro animal, debían saludarle identificando el animal, cuando cada animal encontrara
a su pareja, debía acompañarle a su sitio ya que él no podía ver.
Con lo anterior, pude observar
que la organización de los niños no fue muy buena, pues lo único que ellos
querían al salir del aula de clases era correr y gritar, por lo que se me
dificulto dar las indicaciones y poder reunirlos a todos, sin embargo, a través
de los minutos tome una actitud más responsable y segura que me ayudó a
organizar el grupo no a todos pero sí en su mayoría.
Los niños se veían
emocionados, divertidos al momento de buscar a sus parejas, aunque algunos no
querían imitar al animal buscaron la manera de que su pareja los encontraran. La
dificultad que ellos tuvieron fue distinguir el sonido del animal que había
elegido su pareja, pues todos imitaban al mismo tiempo el sonido de todos los
animales. Fue un juego bastante bueno y llamativo para los niños. Además tuve
la oportunidad de involucrarme con ellos y jugar entre todos.
Niños buscando a su pareja
Para algunos era complicado desplazarse, pues no confiaban caminar sin ayuda de alguien.
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